Ataque a policía
En un mensaje contundente, el jefe de la Policía de Tucumán, Joaquín Girveau, manifestó una postura de extrema dureza frente a la delincuencia. “Tienen que entender que el delincuente que ataque a un policía debe terminar muerto y va a terminar muerto”, declaró Girveau durante una visita al hospital Padilla, donde un oficial herido en un enfrentamiento en Villa Amalia se encuentra internado.
Girveau no dudó en calificar a los delincuentes como “personas que no saben vivir en sociedad”, justificando así una política agresiva de la fuerza provincial ante situaciones de enfrentamiento. “Hoy fue un policía, mañana puede ser cualquier otra persona que vuelve de trabajar”, advirtió, al referirse al caso del lunes por la noche donde un ladrón de 15 años resultó abatido.
El jefe de la fuerza también señaló que los ataques contra los miembros de la Policía han aumentado en un contexto de creciente violencia social y familiar. Este escenario, según Girveau, complica la labor policial y se agrava cuando la población decide “tomar la ley en sus manos” o incluso “obstaculizar el accionar” de las autoridades, como en el reciente caso de la muerte de un menor alcanzado por un disparo en la cabeza.
Las declaraciones de Girveau han generado un debate sobre la respuesta de la fuerza policial frente a la delincuencia y el uso de la fuerza letal, en un momento donde la seguridad es una de las principales preocupaciones de la sociedad tucumana./LosPrimeros
