Hace algunos años que los clubes argentinos incorporaron a sus planteles futbolísticos a profesionales de la salud mental, los psicólogos ocupan un rol importante dentro de la estructura porque tratan de aportar un equilibrio entre el buen rendimiento y el estado anímico del jugador. Diversos factores son determinantes en el deportista pero el estado de ánimo es fundamental, tanto para el progreso deportivo pero más para la vida en general del individuo.

Todos alguna vez experimentamos lo que comúnmente le dicen “bajón”, eso seguramente nos trajo consecuencia en el trabajo, en la familia y en el día a día, todo eso influye en el jugador con el aliciente de que muchas veces su propia afición se lo hace sentir en un reproche. ¿Qué sentirá un jugador cuando lo silban?¿Qué sentirá un jugador que está lejos de su familia y lo insultan?.

Lo mismo que sentimos todos y nos preguntamos porque el resto no nos comprende cuando estamos mal. Ayer murió un gran jugador de fútbol, ayer se quitó la vida un goleador, “El Morro” García que gritaba pidiendo ayuda y todos los hinchas de Godoy Cruz y los aficionados al fútbol lo único que queríamos y esperábamos es que haga un gol. Lo jugadores son humanos y el fútbol es un deporte donde se puede ganar, empatar o perder, pero jamás la vida de una persona merece pagar el costo del triunfalismo. Espero que nos sirva esta reflexión cuando las cosas no nos salen bien y opinamos con bronca de un deportista.
Williams Fanlo
