La inflación en Argentina sigue a la baja: en septiembre fue del 3,5%, la cifra más baja de los últimos meses, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Sin embargo, en la comparación interanual, alcanzó el 209%.
En lo que va del año, la inflación acumula un 101,6%, siendo el rubro de Vivienda, agua, electricidad y combustibles el más afectado con una suba del 7,3%. Este aumento estuvo impulsado por subas en alquileres y servicios. Otro sector relevante fue el de Prendas de vestir y calzado, que subió un 6% por el cambio de temporada.
El mes pasado, la reducción de las alícuotas del impuesto PAIS para las importaciones también favoreció una disminución de precios en ciertos bienes, lo que ayudó a perforar el 4%, un límite que se había mantenido desde mayo. Pese a este respiro, las consultoras privadas prevén que octubre podría mantener niveles inflacionarios cercanos al 3,5%, influenciado por nuevos aumentos en tarifas.
Este descenso en la inflación representa una señal positiva en medio de la crisis económica que atraviesa el país, aunque persisten las preocupaciones por su comportamiento en los próximos meses debido a factores estructurales y a los ajustes en servicios públicos.