Tras la muerte del papa Francisco, la Iglesia Católica se prepara para elegir a su nuevo líder. Dentro de dos semanas, 135 cardenales menores de 80 años se reunirán en el Vaticano para votar al pontífice número 267. Cuando salga el humo blanco de la Capilla Sixtina, Dominique Mamberti será quien anuncie el esperado “Habemus Papam”.
Con 72 años, Mamberti ocupa el rol de cardenal protodiácono, un puesto que le otorga la responsabilidad de comunicar el nombre del nuevo Papa al mundo. Además, será quien imponga el palio al pontífice en la misa de inicio de su pontificado.
Nacido en Marrakech y ordenado sacerdote en Córcega, Mamberti tiene una sólida formación en derecho canónico y una extensa carrera diplomática en la Santa Sede. Actualmente, dirige el Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica, el máximo órgano judicial del Vaticano.
El último antecedente similar fue en 2013, cuando el cardenal Jean-Louis Tauran anunció la elección de Jorge Mario Bergoglio como papa Francisco. Ahora, Mamberti será la voz que marcará el comienzo de una nueva era para la Iglesia.