“Necesitamos dar una clara señal a los mercados, al mundo y a los argentinos que nuestro país avanza hacia el equilibrio fiscal, apuesta a la inversión privada y moderniza su sistema laboral”, dice el comunicado.
En un movimiento clave para mantener la unidad política y asegurar fondos federales para sus provincias, los 10 gobernadores de Juntos por el Cambio (PRO y UCR) manifestaron hoy su respaldo a la Ley Bases y al paquete fiscal propuesto por el gobierno de Javier Milei.
En un comunicado conjunto, los gobernadores enfatizaron la necesidad de otorgar al Ejecutivo las herramientas necesarias para implementar las reformas aprobadas por la mayoría de los votantes en las últimas elecciones.
El comunicado subraya la urgencia de una rápida tramitación legislativa, advirtiendo que cualquier retraso podría afectar negativamente tanto las finanzas nacionales como las provinciales.
“Debemos enviar una señal clara a los mercados, al mundo y a los argentinos de que nuestro país busca el equilibrio fiscal, fomenta la inversión privada y moderniza su sistema laboral”, destaca el comunicado, señalando el consenso entre el oficialismo y parte de la oposición.
Los firmantes del comunicado son Jorge Macri (CABA), Leandro Zdero (Chaco), Ignacio Torres (Chubut), Gustavo Valdés (Corrientes), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Carlos Sadir (Jujuy), Alfredo Cornejo (Mendoza), Marcelo Orrego (San Juan), Claudio Poggi (San Luis) y Maximiliano Pullaro (Santa Fe).
Este respaldo de los gobernadores de Juntos por el Cambio refleja no solo una estrategia política, sino también el reconocimiento de la grave situación económica de Argentina y la necesidad de recursos para las provincias.
En un contexto de alta inflación, déficit fiscal y economía estancada, el Gobierno nacional entiende que la aprobación de la Ley Bases y el paquete fiscal es crucial para generar confianza entre los mercados e inversores internacionales. Esta necesidad es compartida tanto por el gobierno de Milei como por los gobernadores.
La Ley Bases y el paquete fiscal son fundamentales para el gobierno de Milei, que ha cumplido seis meses sin lograr la aprobación del Congreso para sus propuestas. Esto se debe en parte a su situación de minoría, a dificultades iniciales en las negociaciones políticas y a la actitud confrontativa del presidente Milei hacia quienes pueden ayudar a alcanzar sus objetivos legislativos.
