Wanda Nara estuvo junto a su marido, Mauro Icardi, en el canal de streaming Olga, donde dialogaron con Yayo Guridi y el equipo del programa Se extraña la nona. Allí la modelo y empresaria habló de su tratamiento contra la leucemia, pero reveló también cómo vivió su familia el difícil momento del diagnóstico.
“Me hice el análisis y me empiezan a llamar del laboratorio, asustados, era raro”, comenzó diciendo Wanda, y detallando que se trataba de un chequeo anual, sin ningún síntoma. Incluso era casi en apuros, ya que al día siguiente viajaban con Mauro a Turquía porque él iba a firmar contrato para jugar en el club Galatasaray Spor Kulübü.
“Me empiezo a asustar porque no querían comunicarle resultados a mi secretaria. Después la persona del laboratorio que me atiende se pone nervioso y me pregunta si estoy acompañada y que querían comunicarse con mi médico de cabecera”, relató la modelo, quien rápidamente se dirigió a una clínica para repetir los estudios, en medio del miedo y la incertidumbre.
En la clínica decidieron que espere internada mientras hacían más análisis: “Yo no entendía nada, estábamos con las valijas hechas y yo de repente adentro de un tomógrafo. Me internaron y nadie me decía nada. Yo ya imaginaba que me quedaban 24 horas de vida y no me lo querían decir. Pasaron 3 días así y no se sabía nada”.
La reflexión de Wanda Nara sobre su tratamiento por la leucemia
A casi un año de confirmarse que tiene leucemia, Wanda Nara contó cómo hace frente al tratamiento y reflexionó al respecto: “Hoy le decía a la enfermera, que a veces me quejo de las curas que me tengo que hacer, pero después veo todo lo que pasa y hay en Fundaleu y decís, te quejas de guacha, porque siempre hay algo peor”.
fuente: Gente.
