El marroquí Abderrazak Hamdallah, pareja de baile de Karim Benzema en la delantera del Al-Ittihad, se convirtió este jueves en uno de los protagonistas involuntarios de la final de la Supercopa de Arabia Saudí, que se llevó con contundencia el Al-Hilal (4-1) con dobletes de Malcom y Salem Al Dawsari.
Los de Jorge Jesus, que ya acumulan 34 victorias seguidas y llevan 42 encuentros sin perder, fueron superiores a los de Marcelo Gallardo, que venían de ganar los dos últimas ediciones del torneo.
Tras la contundente derrota, Abderrazak Hamdallah, único goleador de su equipo, se dirigió a una parte concreta de la grada y tras recibir algunos insultos por parte de un aficionado, por lo que un hincha sacó un latigo y empezó a tirarle al jugador hasta que lograron sacarlo los demas miembros.