La epidemia del dengue continúa desatando un drama en la provincia, con un creciente número de casos que preocupan a las autoridades y a la comunidad en general. Mientras las cifras de contagios siguen en aumento, las autoridades sanitarias advierten que aún no se ha alcanzado el pico de la enfermedad.
La situación ha llegado a un punto crítico en la capital, donde un colegio se ha visto obligado a suspender las clases presenciales debido a la cantidad de casos de dengue que afectan tanto a alumnos como a docentes.
Se trata del Colegio Calasanz, ubicado en calle Italia al 3.300, donde anunciaron ayer por la tarde a través de un grupo de WhatsApp de padres y madres que, debido a “numerosos casos de dengue entre alumnos y profesores”, se llevarían a cabo clases virtuales durante el día de hoy y mañana.
Esta decisión generó preocupación y controversia, especialmente después de que el Ministerio de Educación provincial descartara la posibilidad de suspender la presencialidad en las escuelas, argumentando que el porcentaje de contagios entre alumnos y docentes era bajo.
Además, la polémica surge debido a que los colegios privados no pueden tomar la decisión de suspender las clases sin contar con el aval del Ministerio de Educación. Las autoridades del coelgio no quisieron dar explicaciones a la prensa.