La TV Pública no transmitirá el Mundial de fútbol. La decisión forma parte de los recortes impulsados por el Gobierno Nacional y representa un cambio profundo en la política de medios públicos.
Desde la Casa Rosada explicaron que la transmisión de eventos deportivos internacionales no es una función esencial del Estado. Argumentaron que las señales estatales no deben competir con medios privados por los derechos de emisión.
En lugar de invertir en el Mundial, el Gobierno planea reorientar el canal hacia contenidos educativos y de gestión. Esta medida, sin embargo, despertó un amplio rechazo. Trabajadores del canal, sindicatos de prensa y referentes del deporte cuestionaron el recorte y lo calificaron como “vaciamiento cultural”.
El cambio impactará directamente en millones de personas que no acceden a plataformas pagas y que históricamente siguieron los partidos a través de la señal estatal. También deja atrás una tradición: desde 1974, la TV Pública transmitía cada Mundial.
