LLAMADO A LA SOLIDARIDAD
Un duro hallazgo fue realizado en la escuela Campo de Las Carreras. Un pedido de ayuda desesperado que hace estrujar al corazón.
“Le voy a pedir un gran favor”. Así arranca la carta hallada por una presidenta de mesa durante el conteo de votos en la escuela Campo de Las Carreras, uno de los 491 establecimientos educativos habilitados para recibir a los millones de tucumanos que asistieron a las urnas para elegir 3 senadores y 4 diputados este domingo. La misiva está firmada por Rolando Ponce, quien dice tener 67 años y ser jubilado, y está dirigida al gobernado Osvaldo Jaldo, a quien le solicita ayuda desesperadamente.
“Ya no puedo pagar más un alquiler, lo que cobro no me alcanza”, se lamenta Rolando. Según se lee en el sentido texto, el jubilado vive en la casa de un sobrino que le solicitó la vivienda para habitarla él. Asegura que buscó otros lugares para vivir, pero que en todos los alquileres rondan entre los $10.000 y $11.000, suma que no puede alcanzar con lo que cobra actualmente, que consiste en un subsidio para adultos mayores.
El pedido puntual del jubilado domiciliado en barrio Manantial Sur, que pese a todas las dificultades que lo atraviesan cumplió ayer domingo con su deber cívico, es que Jaldo o alguien del gobierno provincial le concedan la posibilidad de acceder a una vivienda digna, que ofrece pagar dentro de sus posibilidades. “Yo quiero pagarla, no quiero vivir gratis”, advierte.
Julieta Rébola fue presidente de la mesa 1123 de la escuela Campo de Las Carreras, en donde Rolando emitió su voto y dejó su carta, en un intento desesperado para salir de la situación que lo aqueja. Ella abrió el sobre durante el primer conteo de los votos, que primero fue motivo de risas porque parecía una broma. “Empecé a leerla en voz alta y de pronto todos quedamos en silencio”, recuerda. Desde los 18 años que Julieta se ofrece para fiscalizar los comicios o se anota como autoridad de mesa. Según ella, es la primera vez que encuentra algo así. “Siempre se encuentran bromas, es la primera vez que encuentro algo así; me dio mucha pena”, describe y revela que se pusieron de acuerdo entre los integrantes de la mesa para acercarle algún tipo de ayuda al jubilado.
“Nadie merece llegar así a su jubilación”, se lamenta Julieta, y se queja del dinero que gastaron los políticos en su campaña. “Todos gastaron plata en la campaña, podrían dar soluciones a gente que realmente lo necesita”, reclama. Y concluye deseando que alguien pueda solucionar la demanda de Rolando, pero también la de otras personas como él, que también tienen graves necesidades.
Rolando culmina su carta explicando la verdadera razón de su pedido, y lo hace con una frase que al leerla en voz alta logra estrujar el corazón: “Me veo obligado a pedir ayuda, solo quiero el día que Dios me lleve tener un techo donde me velen en paz”.
Fuente: El tucumano
