“Se ha comunicado muy mal, hay errores gravísimos que hicieron desconfiar de las vacunas”, indicó Pablo Yedlin

El titular de la Comisión de Salud de Diputados reafirma que la vacuna rusa es segura, aunque reconoce que el operativo "se ha demorado muchísimo"; acusa a sectores de la oposición de hacer "daño" en medio de la pandemia.

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En el despacho de Pablo Yedlin solo hay dos cuadros. Uno, con un diploma de la Cámara de Diputados. El otro, con dos fotos que lo muestran junto al gobernador de su provincia, Juan Manzur. Sobre su escritorio, una hoja en blanco y un lápiz negro rápidamente se convertirán en el pizarrón donde buscará graficar y desglosar sus respuestas. Gajes de un profesor en Salud Pública que durante la conformación del gabinete de Alberto Fernández sonó como posible ministro de Salud.

En la entrevista con LA NACION, el actual presidente de la Comisión de Salud de la Cámara baja se suma a los esfuerzos del Gobierno por afirmar que la vacuna Sputnik V es confiable, pero también reconoce que los errores en la comunicación oficial generaron desconfianza entre la población. También, que el operativo de vacunación “se ha demorado muchísimo”. Nada comparado con lo que piensa de la oposición, o al menos de un sector, al que le adjudica la intención de hacer “daño” en medio de la pandemia.

-La oposición dijo que habilitarán las sesiones remotas si se excluyen las reformas judicial y de la Procuración. ¿Van a poder sesionar en enero?

-Podemos sesionar en forma presencial, ahora hay vuelos. Creo que esa nueva artimaña se les está empezando a complicar.

-¿Por qué?

-No me parece bien que lo usen en ese sentido, lo que debería definir el quorum es el voto de la gente. La sesión remota les da una posibilidad más a los diputados del interior de participar, deberíamos cambiar el reglamento para que sea válida para siempre. Igual, hay que vacunar a todos los diputados.

-Estamos lejos del objetivo que planteó el Gobierno: los 10 millones de vacunas en diciembre.

-Eso es lo que está contratado con Rusia, van a llegar. Antes de fin de enero vendrán cuatro millones de la primera dosis y un millón de la segunda. A partir de marzo va a llegar la vacuna de Oxford, y el Ministerio de Salud sigue intentando obtener las de Moderna, Sinopharm y Johnson&Johnson. Hay que ponerse lo que haya.

-¿Cuánto demandará el operativo?

-Se ha demorado muchísimo. Nos vamos a pasar todo el año vacunando. El ritmo con el que arrancó tiene que mejorar, si no, no llegamos. Los planes se van a iniciar cuando lleguen grandes cantidades: dependerá de cada jurisdicción y se realizará con base en los padrones.

-¿Cuál es el objetivo?

-Siempre fue vacunar a todo el personal esencial y de salud y a los mayores de 60 años y grupos de riesgo. En ningún lugar del mundo se están cumpliendo los plazos que habían prometido. Hubo una gestión muy buena para estas 300.000 y hoy toda Latinoamérica le ha pedido a Argentina los contactos, porque la vacuna está funcionando.

-Si los mayores eran parte del objetivo inicial, ¿por qué se adquirió una vacuna que no estaba autorizada para ese grupo?

-No sé. Eso hay que preguntárselo a Carla Vizzotti. Yo me enteré con la polémica con Vladimir Putin, pero dicen que la gente del ministerio sabía. La vacuna rusa no estuvo inicialmente en el radar, no estaba en las revistas médicas y no teníamos mucho conocimiento de cómo era.

El titular de la Comisión de Salud de Diputados reafirma que la vacuna rusa es segura, aunque reconoce que el operativo “se ha demorado muchísimo”; acusa a sectores de la oposición de hacer “daño” en medio de la pandemiaEl titular de la Comisión de Salud de Diputados reafirma que la vacuna rusa es segura, aunque reconoce que el operativo “se ha demorado muchísimo”; acusa a sectores de la oposición de hacer “daño” en medio de la pandemia Crédito: Alejandro Guyot

-Hay muchas objeciones y reclamos por la falta de datos

-Ninguno de los laboratorios terminó la fase 3. Rusia viene más atrás. La diferencia es que los demás los tienen publicados, pero esto no forma parte de lo que el Estado exige para que se autorice una vacuna.

-¿Lo sorprendió que la aprobación llegara desde el Ministerio de Salud y no de la Anmat?

-La polémica la genera la oposición. Los mecanismos que usó la Anmat no son novedosos, se utilizan para una compra de país a país, por eso es el ministerio quien la autoriza. En las otras vacunas hay un laboratorio en la Argentina. En la Comisión de Salud hemos trabajado muy bien, en general hay una buena actitud de la oposición, pero hay un grupo que me parece un poco exagerado.

-¿Quiénes?

-Lilita Carrió, Paula Oliveto, Alfredo Cornejo, Patricia Bullrich. El exministro Adolfo Rubinstein anda deambulando por la prensa, cuando él nos dejó sin vacunas de calendario: eso es un crimen. Han estado en contra o a favor de la cuarentena y del barbijo según el momento. Estaban en contra de las dos dosis, ahora quieren las dos.

-¿Eso no fue un error de comunicación del Gobierno?

-Se ha comunicado muy mal, hay errores gravísimos que han influido en la desconfianza de la gente hacia las vacunas. Lo que se dijo y no se cumplió esta mal, pero hay que entenderlo en un mundo con incertidumbre y con una oposición de esta calaña. Se han dicho cosas que son falsas. La vacuna Sputnik V es una vacuna segura.

-¿Esto complicó la reunión con el ministro de Salud, Ginés González García, a la que no va a asistir Juntos por el Cambio?

-Sumó al descontento. Fue un poco desprolijo, yo lo entiendo, pero el ministro nos estaba recibiendo en una reunión que habíamos armado en conjunto. No sé si la reacción fue por lo de las dosis o porque ya están en un plan electoral y sirve decir que Ginés no quiere recibirlos.

-¿Es una estrategia?

-De alguno de ellos, probablemente. Para que una diputada a los gritos diga “no sabemos qué mierda tienen las vacunas adentro” por Soher El Sukaria, de Pro es porque simplemente no se ponen a leer. Ahora, al poner en Google “mierda y vacunas”, sale su declaración. Hay que tener capacidad para hacer ese daño.

-¿Por qué la reunión no puede ser en el Congreso?

-¿Por qué no puede ser en el despacho de Ginés? Yo creo que el ministro va a venir. Uno se pregunta por qué no vino antes, pero está llevando adelante una pandemia.

-¿Cree que deberán volver las restricciones por la pandemia?

-El aumento de casos es muy preocupante. Lamentablemente, la única solución que hay es mejorar el aislamiento. Estoy de acuerdo con que hay que tomar medidas.

-¿Qué tipo de medidas?

-Hay países que con cada ola cierran todo por 14 días. Eso es una posibilidad. Ha demostrado más utilidad que estos cierres parciales, donde cierran los gimnasios, pero mantienen los bares. Nadie termina entendiendo nada.

-¿Otro error de comunicación?

-No es solo la comunicación, hay que comunicar lo que hacés. Cada provincia debe tomar las decisiones con base en su realidad y no la de Buenos Aires. Es una lección que aprendimos, porque tanto la economía y la educación sufrieron.

-¿Qué debería suceder con las clases?

-La Argentina puede bancar otra ola, pero no un segundo año sin clases presenciales. Tenemos que hacer lo imposible para que haya. Hay que vacunar a los docentes rápidamente.

-¿Los docentes están antes en el plan que las personas mayores?

-Me dijo el ministro de Educación, Nicolás Trotta que están priorizados, pero también que la vacuna no es un requerimiento para el inicio de clases presenciales.

-¿Cuál es su opinión respecto de la reforma del sistema de salud?

-Lo puso en agenda la vicepresidenta, pero en Diputados no hemos recibido ningún proyecto. He leído el programa y muchas cosas forman parte de lo que era la plataforma electoral. Hablé con el ministro de Salud bonaerense Daniel Gollán y lo están viendo. El sistema de salud argentino tiene múltiples inconvenientes.

-¿Cuáles?

-No hay planificación de los recursos humanos. Por cada 10.000 habitantes, hay 4 enfermeros. Estados Unidos tiene 120. De ellos, solo el 17% son profesionales, mientras que en Estados Unidos llegan al 60%. ¿Por qué? Porque en muchas provincias se les paga a las enfermeras como mucamas. No en Tucumán, sí en CABA. Hay problemas de distribución, de financiamiento. Las obras sociales tienen razón al decir que no llegan a los costos.

-A las prepagas les pasa lo mismo, pero no pueden aumentar.

-Tienen que aumentar. La reforma incluye el sistema que queremos. No podés tener atención primaria para los pobres y que los ricos se levanten con dolor de cabeza y vayan al neurocirujano, se hagan una tomografía y después a la tarde se hagan un lifting de párpados. No hay ningún nivel de priorización. Hay que tener un sistema solidario de atención en donde las urgencias no las defina tu financiamiento, sino tu problema.

-Pero, ¿estuvo en la mesa la idea de estatizar?

-No tengo idea. En Argentina ambos sectores son necesarios, hoy no se puede tener un sistema que no sea mixto.

Fuente La Nación