Con profundo dolor y un grito silencioso de justicia, familiares, amigos y vecinos marcharon anoche por las calles de San Miguel de Tucumán en un fuerte reclamo por el crimen de Federico Toledo, el joven de 20 años asesinado a la salida de un boliche. Exigen una condena efectiva contra Santiago Leonel Budini (22), acusado de haberlo matado brutalmente.
La movilización comenzó en avenida Sarmiento al 1200, cerca del lugar donde ocurrió el hecho, y terminó en Plaza Independencia. Hubo velas, carteles y fotos de la víctima, y un silencio estremecedor que se rompía solo con los pasos. Al frente, una bandera exigía: “Justicia por Federico Toledo” y más abajo, en letras negras: “Condena efectiva para su asesino, Santiago Leonel Budini”.
Participaron compañeros del colegio San Francisco, amigos de la infancia y vecinos conmovidos. La consigna que más se repitió fue: “Nunca más un Budini en la calle”, transformada en símbolo del reclamo social por justicia.
En Plaza Independencia, Eduardo Toledo, padre de Federico, habló frente a todos. “Mató los sueños de mi hijo y destrozó a su familia”, dijo. Pidió una condena ejemplar y deseó que los jóvenes puedan volver a sus casas sin miedo. La marcha cerró con un largo aplauso, convertido en homenaje.
