El Ministerio de Capital Humano anunció que la pobreza bajó al 31,7% y la indigencia al 7,3% durante el primer trimestre de 2025. El dato surge de un informe elaborado por el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales (CNCPS), que depende de esa cartera.
El Gobierno atribuye esta baja a dos factores principales: la estabilización macroeconómica y las transferencias directas a sectores vulnerables. Según el relevamiento oficial, la pobreza habría alcanzado un pico del 54,8% en el primer trimestre de 2024, lo que marcaría una baja interanual de más de 23 puntos porcentuales.
Sin embargo, la cifra contrasta con la medición de la Universidad Católica Argentina (UCA), que en su último informe situó la pobreza en el 38,1% y alertó sobre un nivel de “estrés económico” superior al 50%. Ese indicador mide la percepción sobre la capacidad de los hogares para cubrir sus consumos básicos y ahorrar.
El informe del Observatorio de la Deuda Social también señaló que no hubo una baja pronunciada en 2024. Por el contrario, detectó una tendencia creciente de la pobreza desde 2022, en línea con el deterioro de los ingresos y la inflación acumulada.