Lebrón, el perro tucumano campeón en detección de drogas, se consagró en un certamen nacional que reunió a las mejores unidades caninas del país. Con apenas seis años, este pastor belga malinois entrenado por la Policía de Tucumán se transformó en símbolo de excelencia al ganar el primer puesto del Nivel II en Santiago del Estero.
El concurso, organizado por RSV Global, evaluó durante tres días a decenas de binomios de distintas provincias. Tucumán fue representado únicamente por Lebrón, acompañado por sus entrenadores, el cabo 1° Luis Camelli y el sargento Walter Reinaga. La estrella canina ya había sido subcampeón en Córdoba en 2022, y esta vez volvió por la revancha… y la logró.
Las pruebas incluyeron tareas de obediencia, trabajo sin correa y detección precisa de sustancias ilegales. En un ejercicio clave, Lebrón halló tres drogas escondidas entre distractores en solo un minuto y medio, cuando el límite era de cinco. “Un perro mal entrenado se confunde. Lebrón no falló”, explicaron sus guías.
El método de entrenamiento se basa en el juego. Desde cachorro, el animal asoció olores a juguetes impregnados con esencias de estupefacientes. Con refuerzo positivo, desarrolló un olfato tan fino que puede detectar drogas en cantidades mínimas y en muy poco tiempo.
En la Dirección Drogas Peligrosas Oeste (Didrop), donde vive y entrena, Lebrón comparte espacio con otra perra, Luna. “Lo sacamos a distintos entornos para que no se estrese. Es parte de la familia”, cuentan sus compañeros. Además de su olfato entrenado, destacan su temperamento y socialización como claves del éxito.
El logro fue celebrado dentro y fuera de la institución, y la próxima competencia lo espera en Rosario, donde participará en una categoría más avanzada.
