Osvaldo Jaldo atacó a la CGT: “No vamos a ser sujetos de aprietes”

El gobernador se refirió al pedido de que los tres diputados jaldistas retornen a la bancada de Unión por la Patria

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El gobernador tucumano le respondió a la CGT.

La llegada de Javier Milei a la Presidencia de la Nación cambió radicalmente el escenario político para Osvaldo Jaldo, quien confía en que la institucionalidad primará por sobre las diferencias ideológicas.

El gobernador tucumano le ha dado al Gobierno nacional uno de los votos para que el dictamen de mayoría de la polémica “Ley Bases” llegue al recinto de sesiones de la Cámara de Diputados. Pagó un alto costo político dentro de las filas de Unión por la Patria, bajo el argumento de que lo hizo en función de los altos intereses de la Provincia.

La Confederación General del Trabajo (CGT) reclamó que a los tres diputados que responden al gobernador Jaldo, que vuelvan al bloque de Unión por la Patria tras su anuncio de ruptura con Unión por la Patria y división debido a su apoyo a la Ley Ómnibus impulsada por Javier Milei.

A través de una solicitada, la central obrera exigió a Agustín Fernández, a Gladys Medina y Elia Fernández de Mansilla -a los que acusaron de “responden al gobernador Osvaldo Jaldo, cuando tienen que responder al pueblo tucumano”- a cumplir “el contrato electoral” con la sociedad que los eligió. “Es preciso que honren ese compromiso de cara a su responsabilidad institucional y a su pueblo y no que queden abrazados a aquellos tucumanos fieles herederos de la peor dictadura”, afirmaron.

El bloque de diputados de Unión por la Patria tiene tres de los cinco representantes de la provincia en esa cámara en otra bancada (Pablo Yedlin y Carlos Cisneros se mantienen en UxP), con la probabilidad que los jaldistas sean un interbloque que actúe junto con Hacemos Coalición Federal, el grupo que lidera el rionegrino Miguel Ángel Pichetto. Éste repartió loas hacia el tranqueño, tras su decisión de mantenerse entre los gobernadores denominados dialoguistas.

La postura de la CGT incomodó a Jaldo, que no pudo mantener la estructura sindical que había montado en la Secretaría de Trabajo de la provincia. Desplazó al cegetista y líder de los Camioneros en la provincia, César Torres. El decreto fue firmado por el vicegobernador en ejercicio del Poder Ejecutivo Miguel Acevedo y por el ministro de Gobierno, Regino Amado.

En el decreto 251/14 se expresa que “se hace necesario dar por terminadas las funciones de Torres”. Así también reza el artículo 1, pero ni en los considerandos ni en el resto del cuerpo del decreto se le da las gracias por los servicios prestados, una frase de estilo, pero también que hace a los modismos administrativos. No es obligación, pero denota la frialdad de la decisión.

La misma suerte corrieron el subsecretario del área, Luis Barrionuevo, y el director provincial de Trabajo, Hugo Veneziano.

Con una velocidad administrativa poco usual, el Poder Ejecutivo dicta el decreto 252, mediante el cual se designa al dirigente azucarero de Fotia Luis González, como secretario de Trabajo, que tomará posición inmediata del cargo.

La solicitada de la CGT irritó al gobernador. “Los diputados del bloque Independencia han tomado una decisión sin retroceso, con total responsabilidad”, afirmó Jaldo. Esa declaración conservó las formas institucionales. La siguiente fue una contestación política: “no vamos a ser sujetos de aprietes, vengan de donde vengan”. 

El mandatario continuó con sus apreciaciones y aseguró que esa nueva bancada, con tonada tucumana, “defenderá nuestras economías regionales, a diferencia de otros que las negocian”.

Fuente: Los Primeros.