“Lo único que necesitábamos era una firma que nos permitiera que la ambulancia ingresara a Aguilares. No pedimos nada más, ya teníamos la clínica en la que se iba a internar y nosotros lo íbamos a cuidar”, comenzó diciendo Hernán, uno de los hijos de Roque Gordillo, que falleció el 20 de agosto esperando la autorzación del COE para que regresara a Tucumán, ya que vivía sólo en Buenos Aires.
El 6 de agosto iniciaron los trámites y desde un mail del COE le manifestaron que lo snetían mucho y que se comunicaran a otro mail para poder averiguar los pasos a seguir, pero no dieron más información.
“Nos gustaría saber cuál fue el tratamiento de este caso, para que no le pase a nadie más”, expresó Gordillo.
Hace tres semanas fue la última vez que habló con su papá.
Fuente Tucumán TELEFE.
