Con el objetivo de poder ofrecer a estas personas soluciones personalizadas para incrementar las posibilidades de tener hijos.
El programa lo ha puesto en marcha la Fundación MARGen Mendoza-Tesarik, con la colaboración de la Clínica Margen de Granada, y se centrará en su primera fase de estudio en la evaluación de los niveles en la sangre de las hormonas implicadas en la formación y maduración de las células germinales, así como análisis de sangre, espermiogramas y espermocitogramas para identificar si las dificultades reales de la pareja para procrear de forma natural.
Basándose en estos resultados, los médicos pueden establecer las probabilidades de fecundación de forma natural o con técnicas de reproducción asistida, así como aquellas parejas que no podrían quedarse embarazadas de ninguna de las dos maneras.
La segunda parte del programa se centrará en el desarrollo de técnicas de reproducción asistida ‘ad hoc’ para lograr que parejas con síndrome de Down puedan tener hijos.