La jueza Ana María Mena de Bulacio sentenció al Consejo Directivo del Colegio de Abogados de Tucumán a realizar de manera obligatoria un curso de Género, debido a una sanción disciplinaria que la institución tomó contra una trabajadora que había denunciado acoso sexual.
El fallo surge de una demanda impuesta por Inés Nacus contra el colegio de letrados de Tucumán, que decidió suspenderla por 30 días tras realizar su denuncia.
Por esta razón, la magistrada resolvió retirar la suspensión,“la cual deberá ser eliminada de su legajo personal, y condenar a la demandada a pagar a la Sra. María Inés Nacus, en un plazo de diez días de quedar firme la presente resolución, el salario caído con motivo de la sanción impuesta. Dicho importe deberá ser actualizado con el método de la tasa activa del Banco de la Nación Argentina desde que las sumas son debidas y hasta su efectivo pago, por lo considerado”.
En ese sentido, Ana María Mena de Bulacio decidió imponer “al presidente del Colegio de Abogados de Tucumán y a los miembros del Consejo Directivo la asistencia obligatoria a un taller que brindará la Oficina De La Mujer dependiente de nuestra Corte Suprema de Justicia sobre sensibilización y capacitación en perspectiva de género bajo apercibimiento, en caso de inasistencia o incumplimiento, de imponer sanciones conminatorias a favor de la parte actora”, reza el documento.
Tras el fallo, según informa el sitio El Federalista, el Colegio apeló la sentencia, y que quienes votaron en contra, en un primer momento de la sanción a Inés, se sienten afectados y molestos por la sentencia que los incluye. Ellos son: Pablo Cifre, Ignacio Chasco Olazabal y Félix Gutierrez. Dichos consejeros habían explicado que sancionar a la mujer era revictimizar y que por eso habían votado en contra, y además, que consideraban que el Concejo se equivocaba al sancionarla porque estaban vulnerando su derecho a la defensa.
Fuente el tucumano
