El gobernador en uso de licencia, Osvaldo Jaldo, criticó al gobierno nacional este martes. Se refirió al manejo de la economía y aseguró que, tras dos años de gestión, todavía “no encuentra el rumbo correcto”. El mandatario expresó su preocupación por la falta de previsibilidad. Además, alertó sobre el grave impacto de las políticas actuales en la industria de Tucumán, especialmente la apertura de importaciones. “Apostamos a que el gobierno nacional encuentre el camino de una vez por todas”, sentenció.
Durante sus declaraciones, Jaldo detalló los problemas macroeconómicos que frenan la actividad. Cuestionó la falta de crédito para el sector productivo debido a tasas de interés que rondan el 80%. “No hay ninguna actividad que tenga una rentabilidad que te permita pagar una tasa de interés de esos niveles”, remarcó. A esto sumó la incertidumbre sobre el tipo de cambio, que impide a los productores proyectar sus cosechas. También mencionó la inestabilidad del riesgo país, que ahuyenta las inversiones.
El foco principal de su análisis estuvo en el daño a la industria local. “La política de abrir las importaciones a Tucumán le está haciendo mucho daño”, afirmó. Explicó que empresas textiles pasaron de operar con tres turnos a solo uno. Esto significa una fuerte pérdida de ingresos para los trabajadores. El caso más alarmante, según Jaldo, es el de la empresa Scania. Por primera vez en décadas, suspende su producción por 20 días cada dos meses. “No es un semáforo amarillo, ya es un semáforo rojo”, advirtió.
Finalmente, el gobernador repasó la crisis que afecta a otros sectores clave de la provincia. Mencionó las dificultades de la actividad sucroalcoholera por la falta de actualización en el precio del etanol y el bajo valor del azúcar. El único punto positivo que rescató fue la producción de limón, que “se acomodó un poquito” gracias a los precios internacionales. En su análisis, Jaldo criticó al gobierno nacional por no proteger a las economías regionales.