Los incendios en Córdoba continúan empeorando, con el Valle de Punilla como la zona más afectada. El fuego ya arrasó más de 10.000 hectáreas, y las autoridades ordenaron evacuar Capilla del Monte y San Esteban. El gobernador Juan Schiaretti anunció que declarará la región como zona de catástrofe para canalizar más recursos y ayuda a los damnificados.
Más de 600 bomberos y brigadistas trabajan en el lugar, pero las condiciones climáticas, como el viento fuerte y las altas temperaturas, dificultan las tareas. En Capilla del Monte, evacuaron los barrios Aguas Azules y Águila Blanca, y los afectados reciben asistencia en el Centro de Día Juan Perón. También cortaron la Ruta Nacional 38 a la altura del kilómetro 119 por el avance del fuego y el humo.
La policía detuvo a una segunda persona, sospechosa de haber iniciado intencionalmente uno de los incendios en Punilla. Las investigaciones siguen y no descartan más arrestos en los próximos días.
El fuego avanza en otras zonas, como Villa Berna y Salsacate, poniendo en peligro la fauna y flora locales. A pesar del trabajo conjunto de los gobiernos provincial y nacional, las condiciones aún impiden controlar los incendios.