El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, confirmó que la administración de Donald Trump mantendrá el arancel del 10% para las importaciones provenientes de Argentina, en el marco de una revisión de su política comercial global. El anuncio se dio luego de que surgieran dudas por la reciente suspensión temporal de aranceles a otros países.
Trump había anunciado una pausa de 90 días en los aranceles para 75 países que no tomaron represalias comerciales, pero Argentina no figura entre ellos, por lo que continuará con el gravamen base vigente. La medida fue presentada como parte de una estrategia para renegociar acuerdos comerciales y reforzar el vínculo con países alineados con Estados Unidos.
El mandatario republicano también resolvió aumentar al 125% los aranceles para las importaciones desde China, calificando su conducta como una “falta de respeto” hacia los mercados internacionales. Bessent remarcó que “no responder con represalias será recompensado”, y apuntó que algunos países como Vietnam ya buscan acercamientos con Washington.
Desde el Tesoro de EE.UU. señalaron que esta política tiene como objetivo presionar a países con desequilibrios comerciales con Estados Unidos, y aseguraron que Trump está dispuesto a negociar con cualquier nación interesada. Pese a las tensiones, los mercados reaccionaron positivamente, con subas en Wall Street y también en los activos argentinos.