Paulo Dybala negocia un contrato de por vida con la Roma, el club donde encontró estabilidad deportiva y afectiva desde su llegada en 2022. El vínculo actual vence en junio de 2026, pero las charlas avanzaron hacia una extensión hasta 2030. La Joya aceptaría una rebaja salarial para facilitar el acuerdo, en línea con las restricciones de fair play financiero que impone la UEFA.
Según medios italianos como Corriere dello Sport, el nuevo contrato podría cerrarse en las primeras semanas de octubre. Dybala busca seguir en la capital italiana no solo por razones deportivas, sino también personales: espera su primera hija junto a Oriana Sabatini, lo que refuerza su deseo de afincarse en Roma.
El gesto del argentino fue muy valorado por la dirigencia. Está dispuesto a dejar atrás su salario actual de 8 millones de euros netos por temporada para ayudar al club a reducir su masa salarial. La propuesta incluiría una extensión de al menos cuatro años, lo que lo convertiría en una figura histórica del club, superando su etapa en la Juventus, donde jugó siete temporadas.
Desde su arribo, Dybala se convirtió en el jugador más querido por los hinchas. Lleva el dorsal 10, que usó durante años Francesco Totti, y lidera la venta de camisetas. Sin embargo, su paso por la Roma también estuvo marcado por las lesiones: sufrió más de 15 problemas físicos y actualmente se recupera de una molestia muscular en el muslo izquierdo. Solo disputó tres partidos en la temporada actual.
A pesar de haber recibido ofertas millonarias desde Arabia Saudita, Dybala eligió permanecer en Roma. Desde su llegada, jugó 116 partidos, marcó 42 goles y dio 22 asistencias. Ahora busca construir un legado duradero en el club que lo adoptó como ídolo.
