Pablo Macchiarola, intendente de Yerba Buena, acusó al gobierno provincial de Tucumán de discriminar a su municipio en el reparto de fondos, basado en los datos del Censo Nacional de 2022. Según el censo, Yerba Buena es el tercer municipio más poblado de la provincia, con 82.129 habitantes, pero ocupa el undécimo lugar en el reparto de fondos de coparticipación.
Macchiarola destacó que la Ley 6316 de 1991, que regula la coparticipación de fondos, no refleja la realidad poblacional actual. Señaló que municipios con menos de la mitad de la población de Yerba Buena reciben más fondos, lo que considera una clara desventaja. Además de Yerba Buena, otros municipios como Aguilares, Alderetes, Famaillá y Las Talitas también deberían ser promovidos a una categoría superior, lo que implicaría una revisión de los porcentajes de coparticipación y la ampliación del número de ediles en los concejos deliberantes.
El intendente propone una solución que no afectaría negativamente a las comunas y municipios vecinos: incluir los Ingresos Brutos en la coparticipación y reflejar así la realidad poblacional y de viviendas. “Esto permitiría que Yerba Buena reciba los recursos que merece, siendo la tercera ciudad con más habitantes en la provincia”, explicó Macchiarola. Además, criticó que Tucumán es la provincia que menos recursos gira a los gobiernos locales, con un 13,5% de sus ingresos destinados a la coparticipación, muy por debajo del promedio nacional del 20%.
El censo reveló que, además de Yerba Buena, municipios como Aguilares, Alderetes, Famaillá y Las Talitas cumplen con los requisitos para ser considerados de primera categoría. Tafí del Valle también cumple con los criterios para ascender a la segunda categoría, lo que requeriría ajustes en la distribución de fondos y la estructura administrativa de estos municipios.