El Gobierno Nacional concretó un nuevo movimiento político dentro de la estructura financiera estatal este martes. El Poder Ejecutivo oficializó la designación de Carolina Píparo como directora del Banco de la Nación Argentina. La medida se comunicó a través del decreto 907/2025 publicado en el Boletín Oficial durante la madrugada. La funcionaria asumió el cargo en reemplazo de Rodolfo Carvajal. Su nombramiento llevó las firmas del presidente Javier Milei y del ministro de Economía, Luis Caputo.
Plazos y mandato
El documento oficial estableció con precisión los tiempos de la gestión de la nueva funcionaria. Píparo comenzó sus funciones formalmente el pasado 11 de diciembre, un día después de que se hiciera efectiva la renuncia de su antecesor. Su mandato se extenderá hasta el 1° de enero de 2028 según lo dispuesto por las autoridades nacionales. Esta fecha límite respondió a la necesidad técnica de completar el período legal establecido en la Carta Orgánica de la entidad bancaria. La normativa aceptó previamente la dimisión de Carvajal, quien dejó el puesto el 10 de diciembre tras prestar servicios en el directorio.
Reestructuración de la cúpula
Esta modificación formó parte de una reorganización más amplia en la conducción del banco. El Gobierno formalizó también la salida de Daniel Tillard de la presidencia mediante el decreto 903/2025. El Ejecutivo designó a Darío Wasserman como el nuevo titular de la institución financiera en el mismo acto administrativo. Wasserman se desempeñaba hasta el momento como vicepresidente del organismo y ascendió al máximo cargo. Las renuncias de los funcionarios salientes, que habían sido nombrados por la administración anterior, fueron aceptadas con el agradecimiento protocolar por los servicios prestados.
Consolidación política
La llegada de la legisladora al directorio del Banco Nación marcó una nueva etapa en su relación con el oficialismo. La dirigente platense consolidó su vínculo con la administración libertaria tras ocupar su banca en el Congreso y protagonizar diversos acercamientos políticos. Su incorporación al equipo económico buscó fortalecer la conducción política dentro de la banca pública. El Gobierno completó así los casilleros vacantes en una de las herramientas financieras más importantes del Estado para la ejecución de sus políticas crediticias y de fomento.


