El presidente Donald Trump anunció este miércoles que la empresa Coca-Cola acordó usar azúcar de caña en su producción en Estados Unidos, en reemplazo del jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF). Aunque la compañía no confirmó oficialmente el cambio, el mensaje generó fuerte repercusión en redes sociales y en el sector alimenticio.
“He hablado con Coca-Cola sobre el uso de azúcar de caña REAL, y han accedido”, escribió Trump en su red Truth Social. “Será una muy buena decisión. ¡Es sencillamente mejor!”, afirmó el mandatario, quien recientemente reinstaló en la Casa Blanca el famoso “botón de Coca-Cola Light”.
Actualmente, las bebidas producidas en EE.UU. contienen JMAF, un endulzante económico y subsidiado desde los años ‘70. La fórmula ha sido cuestionada por su impacto en la salud. El secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., impulsa la campaña “Haz que Estados Unidos vuelva a ser saludable otra vez”, que promueve eliminar este ingrediente de los alimentos procesados.
Desde la empresa, respondieron con cautela: “Agradecemos el entusiasmo del presidente Trump por nuestra icónica marca. Pronto compartiremos más detalles sobre nuevas ofertas”, indicaron en un comunicado oficial.
Expertos recuerdan que no hay evidencia concluyente de que el azúcar de caña sea más saludable que el JMAF, aunque algunos estudios detectaron niveles más altos de inflamación en quienes consumen jarabe de maíz. Aun así, la Coca-Cola mexicana, que ya usa azúcar de caña, se vende más cara en EE.UU. y es apreciada por su sabor “más natural”.
El cambio podría tener un impacto económico fuerte en el llamado “cinturón del maíz”, una zona agrícola clave del Medio Oeste que ha sido históricamente aliada del trumpismo. Se espera que las asociaciones de productores reaccionen si el anuncio se confirma con medidas concretas.
