“Seguimos peleando. Vamos a seguir gobernando la Argentina porque la sociedad no nos va a perdonar que vuelva el macrismo”. En medio del tembladeral económico y cuando restan 24 días para las elecciones, el presidente Alberto Fernández buscó enviar un mensaje de unidad y pidió “estar en la calle”, “escuchar” y “militar”.
En un almuerzo en el quincho de la quinta presidencial de Olivos con parte de su gabinete; el jefe del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner; el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; el gobernador Axel Kicillof –estuvo de forma virtual– e intendentes, el Presidente realizó un repaso detallado del escenario electoral y formalizó los tres ejes neurálgicos: defensa del bolsillo de los argentinos, estabilidad de los precios y seguridad.
“Ya sabemos lo que la gente necesita y le hace falta. Esto hay que darlo vuelta y podemos hacerlo porque tenemos el diagnóstico adecuado. De nosotros depende que ganemos”, les dijo el jefe del Estado.
El encuentro fue para articular el trabajo de las próximas semanas y coordinar la última parte de la campaña. Otro de los temas que se trató fue el de los precios de los alimentos. “Vamos a salir a controlar el cumplimiento de los 1432 productos de precios cuidados que ya están en la web. Que estén en las góndolas y bien señalizados”, dijeron fuentes oficiales.
Como pregona casi a diario Antoni Gutiérrez Rubí, el consultor político catalán que coordina la Campaña del “Sí” con la que el Gobierno intenta dar la pelea electoral, Fernández les pidió estar cerca de la gente, escuchar el mensaje, pero sobre todo trabajar para convencer a la gente de que vaya a votar, esa es la clave sobre la que trabaja el Frente de Todos.
La conclusión fue que la única forma para lograr dar vuelta el resultado de las PASO es ir “resolviendo los problemas cotidianos de los argentinos”. El Presidente dio como ejemplo la recorridas que protagonizó por el conurbano bonaerense. “Las respuestas que tenemos que dar las damos en cada barrio, en cada municipio”, explicaron fuentes oficiales. El mandatario también exhortó a “recuperar la diversidad del Frente de Todos”.
Por la provincia los encargados de hacer un balance fueron Kicillof; su ministro coordinador, Martín Insaurralde y Cristina Alvarez Rodríguez. Y en representación de los jefes comunales hablaron Juan José Mussi (Berazategui), Ariel Sujarchuk (Escobar), Alejandro Granados (Ezeiza), Federico Achával (Pilar) y Alberto Descalzo (Ituzaingó), entre otros.
También estuvieron presentes los ministros de Agricultura, Julián Domínguez, y de Transporte, Alexis Guerrera; el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello; la titular de Aysa, Malena Galmarini; el administrador general de Vialidad Nacional, Gustavo Arrieta. Y los intendentes Mayra Mendoza (Quilmes), Mariano Cascallares (Alte. Brown), Mariel Fernández (Moreno), Andrés Watson (Florencio Varela), Mario Secco (Ensenada), Nicolás Mantegazza (San Vicente), Fabián Cagliardi (Berisso), Luis Andreotti (San Fernando), Julio Zamora (Tigre), Blanca Cantero (Presidente Perón), Juan Ignacio Ustarroz (Mercedes) y Javier Osuna (General Las Heras).
Fuente La Nación
