Los resultados presentados en este trabajo, muestran claramente una estrecha relación entre la cantidad de partículas sedimentables en la atmósfera, la zafra azucarera y la nociva práctica de la quema de cañaverales durante la cosecha de la caña de azúcar, incluyendo el consumo de bagazo como combustible por parte de los 15 ingenios azucareros.
Las siguientes imágenes son más que elocuentes sobre sobre la magnitud del fenómeno emisor de maloja y hollín, sumado a otros contaminantes atmosféricos tales como dioxinas, furanos, monóxido y dióxido de carbono entre otros.
Figura 1. Quema del cañaveral que saca de servicio lineas de alta tensión con perjuicio a usuarios urbanos, rurales y empresas.

Figura 2.
Tucumán cuenta con 260.000 hectáreas sembradas con caña. El calor de los incendios eleva columnas de humo que arrastran material sólido con partículas finas comprendidas entre pocos micrones y malojas que son fracciones de follaje quemado con longitudes que llegan hasta 12 cm y logran trasladarse por acción del viento hasta 50 Km de distancia, cayendo sobre los techos de las viviendas, pisos, calles y superficies verdes de zonas urbanas. Los estudios de campo y laboratorio demuestran que el material sedimentado promedio en la provincia durante la cosecha de la caña, alcanza los 25 mg/cm2.mes cuando el valor máximo permisible por la ley en vigencia es de
1 mg/cm2.mes, es decir que supera en 25 veces la norma. Considerando que que esta lluvia de partículas impacta en forma neta sobre unas 7.000 hectáreas, esto se traduce en 16.800 toneladas que caen del cielo por mes.

Figura 3. Material sedimentado sobre un patio de vivienda en capital de Tucumán.

Figura 4.
Al ser ajetreadas por el viento, el pisoteo y otros factores físicos, se re suspenden en el aire y pueden entrar en contacto con las mucosas ocular y respiratoria de las personas, ocasionando cuadros alérgicos respiratorios y oculares de variada gravedad.

Estos sedimentos atmosféricos vistos al microscopio presentan una estructura esponjosa con abundantes sacos aéreos y fibras carbonosas agudas Figura 5.
Características Químicas
Las cenizas de la maloja, poseen 20% de materia mineral , pH = 7,9 (ligeramente alcalino) , rica en potasio con vestigios de cloruros, con un 80% de materia orgánica impregnada con hollín e hidrocarburos precursores cancerígenos.
Figura 5. Material sedimentado visto al microscopio con 200 aumentos.

Figura 6. Imagen captada a la vera de la ruta 38 el 10 de Setiembre de 2021.

Características Microbiológicas
Figura 7. Cultivo microbiológico de polvo atmosférico que sedimenta desde el cielo en Tucumán

Puede verse claramente que las colonias de microbios no crecen a la par de las partículas de maloja, sino en otros sitios de la caja de cultivo, lo cual indica que la maloja no transporta cantidad apreciable de gérmenes. Los gérmenes que crecen corresponden a los que aporta el polvo ambiental.
Sin embargo, no dejan de constituir cuerpos extraños que van a causar reacciones inflamatorias adversas en las mucosas respiratorias y oculares por la presencia de hidrocarburos.

Figura 8. Conjuntivitis por partículas extrañas asociadas a contaminantes atmosféricos.

Figura 9. Polvo ambiental y hollín de la atmósfera de Tucumán visto en el microscopio.
Costo Social : Un estudio comparativo con otras ciudades que cultivan caña o que poseen climas semejantes en el mundo, muestra claramente el costo social de la contaminación. Se compara el consumo de medicamentos antialérgicos, anti histamínicos, anti inflamatorios, mucolíticos, bronco dilatadores y antibióticos que consumen los pacientes en Tucumán estimado en 8 millones de dólares anuales, siendo este costo 4 a 5 veces mayor a otras referencias.
CIUDAD | COSTO UNITARIO | CONSUMO ANUAL |
Tucumán | 20 dólares/ habitante.año | U$S 8.000.000 |
Porto Alegre | 5 dólares/ habitante.año | – |
La Habana Cuba | 3 dólares/ habitante.año | – |
Sud África | 4 dólares/ habitante.año | U$S 400.000 |
Antofagasta | 1 dólares/ habitante.año | U$S 60.000 |
Tabla 1. Comparativo de consumo para medicamentos
Recomendación
Se aconseja el uso de máquinas integrales para la cosecha en verde. “Estos equipos son aptos para realizar la tarea de cosecha sin utilizar fuego, ya que generan una buena limpieza de las hojas de la caña y un correcto despuntado de manera mecánica, sin necesidad de quemar el cultivo”.
Presenta como ventaja la velocidad con que estas máquinas permiten finalizar el proceso de cosecha en el campo. Otro de los beneficios de este sistema, es que permite dejar el rastrojo en la superficie para luego ser incorporado con el cultivo mecánico. De esta manera, devolvemos al suelo la materia orgánica y parte de los nutrientes que fueron extraídos durante el período de crecimiento del cañaveral. Además, el aporte lógico que implica la no utilización del fuego al medioambiente al evitar la emisión de gases de efecto invernadero”. Ref. / Ing. Agr. Arturo Felipe INTA EEA Famaillá.

Lic. Juan Carlos Luján
Investigador Área Química, CEDIA
UTN-FRT