El Municipio de Yerba Buena resolvió que desde ahora sólo estará permitido la utilización de pirotecnia sin estruendo, por lo que para estas fiestas, sólo estarán permitidos los productos que generen luces.
De acuerdo a lo resuelto por la intendencia conducida por Mariano Campero, “queda prohibido en todo el territorio del municipio la tenencia fabricación, comercialización, depósito circulación venta al público mayorista o minorista así como la manipulación y uso particular de todo elemento de pirotecnia y cohetería de tipo explosiva o de combustión con efecto ruidoso cualquiera fuera su característica y naturaleza ya sean de venta libre o no y /o fabricación autorizada”.
En ese sentido, informaron que por pirotecnia de tipo explosiva o de combustión con efecto ruidoso se incluye “a todos los fuegos artificiales, cohetes, rompe portones, bombas de estruendo, triángulos, petardos, foguetas, tortas, mortero, mortero con bomba triquitraques buscapiés, luces de bengala, garbanzos y cualesquiera otros análogos en los que se utilice cualquier compuesto químico o mezcla mecánica que contenga unidades oxidantes y combustibles u otros ingredientes o cualquier sustancia que por sí sola o mezclada con otra pueda ser inflamable, no importa las cantidades o la forma o diseño de esos productos que al ser encendida por el fuego por fricción, conmoción, percusión o detonador, cualquier parte de dicho compuesto o mezcla pueda producir una repentina reproducción de gases capaces de producir ruidos”.
Por último, aclararon que “que la realización de espectáculos de fuegos artificiales siempre, que sean de efecto lumínicos no ruidoso, deberán contar previamente con la autorización.
La medida tiene que ver principalmente con la situación que atraviesan las personas con hipersensibilidad auditiva y, fundamentalmente, la población que se encuentra dentro del espectro autista.
La semana pasada, la especialista Josefina Porta, contó a eltucumano.com cuál es la realidad a la que se enfrentan las personas del espectro autista cuando se exponen a la pirotecnia sonora y cómo es el proceso que atraviesan las familias para contener los momentos de crisis.
“Si un adulto sabe que su hijo o hija con espectro autista sufre de crisis cuando se expone al sonido de la pirotecnia, es necesario consultar previamente con el neurólogo o el psiquiatra de ese niño para poder brindarle una medicación que ayude a que esa situación no sea tan angustiante”, recomendó la especialista.
Fuente el tucumano
