La violencia urbana se cobró una nueva víctima fatal en San Miguel de Tucumán esta semana. El barrio sur de la capital quedó conmocionado tras confirmarse el crimen de Mariela Suárez. Las autoridades sanitarias informaron que la mujer de 50 años falleció este lunes a las 7.30 de la mañana en el Hospital Padilla. Ella permaneció internada en estado crítico durante casi 48 horas. El desenlace fatal ocurrió como consecuencia de las graves lesiones neurológicas que le provocó un disparo en la cabeza.
La cronología del ataque
El episodio sangriento sucedió durante la noche del sábado. El reloj marcaba las 21.20 horas cuando se desató el conflicto en la intersección de las calles Matienzo y Granaderos de San Martín. Mariela del Carmen Suárez se encontraba dentro de su vivienda en ese momento. La mujer advirtió que su hijo, Sebastián Luna, había quedado envuelto en una violenta pelea con otros vecinos. Su instinto materno la impulsó a salir de la casa inmediatamente para ponerlo a salvo y terminar con la disputa.
Suárez intervino en la riña y logró llevar a su hijo hacia la galería de su propiedad para resguardarlo. Sin embargo, la situación escaló de manera imprevista y letal. Un hombre apareció repentinamente a bordo de una motocicleta en el lugar de los hechos. El sujeto extrajo un arma de fuego y disparó varias veces contra las personas presentes. Uno de los proyectiles impactó directamente en el cráneo de la madre, quien cayó gravemente herida en el acto.
Investigación y denuncia
Los familiares trasladaron a la víctima de urgencia al nosocomio en un vehículo particular ante la demora de los servicios de emergencia. A pesar del esfuerzo de los médicos, el cuadro clínico resultó irreversible. La sobrina de la fallecida, Guadalupe del Milagro Santucho, de 22 años, radicó la denuncia en la comisaría jurisdiccional poco después del ataque. La joven aportó datos claves para esclarecer el crimen de Mariela Suárez y aseguró haber identificado al autor de los disparos.
La Justicia tomó intervención inmediata para determinar las responsabilidades del caso. Los investigadores trabajaron para corroborar los testimonios aportados por los testigos presenciales. La policía inició la búsqueda del sospechoso señalado por la familia, aunque hasta el momento no se registraron detenciones oficiales. El asesinato generó indignación entre los vecinos de la zona por la brutalidad del ataque contra una mujer que solo intentaba proteger a su hijo.


