San Miguel de Tucumán amaneció este jueves sin transporte público. La Unión Tranviarios Automotor (UTA) lanzó un paro de colectivos en Tucumán que afectó a 13 de las 14 líneas urbanas. La medida dejó a miles de usuarios sin servicio en la capital.
El titular de UTA, César González, explicó que la medida de fuerza fue la respuesta al rechazo de AETAT de revertir la suspensión de 150 trabajadores. El conflicto se disparó tras la decisión empresarial.
La huelga fue casi total en la capital. La única firma que no adhirió al paro fue la Línea 8, ya que fue la única que no dispuso suspensiones. Los servicios interurbanos y rurales funcionaron con normalidad, ya que las suspensiones fueron solo en líneas de capital.
El paro se enmarcó en la fuerte tensión entre AETAT y la Municipalidad. Los empresarios insistieron en su reclamo de aplicar un sistema de pago “por kilómetro recorrido”. Acusaron al municipio de “inacción” por el “quebranto” del rubro y por no controlar el transporte ilegal, como Uber Moto. El fiscal municipal, Conrado Mosqueira, había calificado la postura de AETAT como “extorsiva”.


