El Senado de la Nación volverá a tratar la próxima semana la Ley de Emergencia en Discapacidad, que ya obtuvo media sanción en Diputados y fue vetada por el presidente Javier Milei. La oposición sostiene que tiene los dos tercios de los votos necesarios para insistir con la norma y aprobarla definitivamente el jueves.
El proyecto propone ajustar los aranceles de las prestaciones por inflación desde diciembre de 2023 y crear una pensión no contributiva equivalente al 70% del haber mínimo. Para acelerar el debate, la oposición decidió llevar el texto directamente al recinto, sin dictamen previo de comisiones, en un contexto atravesado por el escándalo de los audios del ex titular de la ANDIS, Diego Spagnuolo, sobre presuntas coimas.
En la Cámara de Diputados, la iniciativa se aprobó el 20 de agosto con 172 votos afirmativos, contra 73 rechazos y 2 abstenciones, superando con comodidad la mayoría especial requerida. En el Senado, la primera votación también había alcanzado los números necesarios, con 55 votos positivos y 17 ausentes. Por lo tanto, los bloques opositores confían en repetir e incluso ampliar ese resultado.
La estrategia cuenta con el respaldo de Unión por la Patria (34 senadores), la mayoría de la UCR (que en la primera votación aportó 9 de sus 13 miembros) y bloques provinciales como Despierta Chubut, Por Santa Cruz, Unidad Federal, además de parte del PRO. En cambio, el oficialismo de La Libertad Avanza quedaría en franca minoría.
El debate se dará en un clima electoral y en medio de una fuerte presión social vinculada a los derechos de las personas con discapacidad. Si se logra aprobar, la oposición habrá concretado un hecho político de alto impacto: revertir un veto presidencial en plena campaña.