La “Locomotora” Oliveras va a quedar con secuelas neurológicas luego del ACV que sufrió hace más de una semana. Según el último parte médico, la ex boxeadora permanece en estado crítico, con asistencia respiratoria y edema cerebral. El Hospital José María Cullen, en Santa Fe, confirmó que el daño en su cerebro es grave y podría ser permanente.
Oliveras sufrió un ACV isquémico mientras dormía y fue derivada a un hospital regional en Santo Tomé antes de ser trasladada de urgencia a Santa Fe capital. Cuando llegó, los médicos ya habían detectado un infarto frontal avanzado. Según los especialistas, la paciente se encontraba “fuera de ventana” para recibir tratamiento temprano, lo que complicó su evolución.
El jefe de terapia intensiva, Néstor Carrizo, explicó que “la paciente está estable en términos clínicos, pero con alto riesgo de vida”. Confirmó que tendrá secuelas neurológicas, aunque aún no se puede determinar la magnitud. La lesión afecta el hemisferio izquierdo del cerebro, que suele controlar el lenguaje y las funciones motoras del lado derecho.
Por su parte, el neurorradiólogo Alejandro Musacchio reveló que Oliveras tenía una arteria carótida casi obstruida por una placa de ateroma y calcio, y que sufría hipertensión no controlada. Debido a la gravedad, se le practicó una craneotomía para reducir la presión intracraneal y evitar la muerte cerebral.
Los médicos insistieron en la importancia de actuar rápido ante un ACV. Los primeros síntomas suelen ser desorientación, caída involuntaria de un brazo, desviación de la boca o pérdida de visión parcial. “No hay que esperar una ambulancia; hay que llevar al paciente de inmediato a un centro con tratamiento para ACV”, remarcaron.


