El vocero presidencial Manuel Adorni anunció que el Gobierno desactivó una red de espionaje ruso en Argentina. La investigación estuvo a cargo de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) y reveló que ciudadanos rusos operaban en favor de Moscú desde territorio nacional.
La estructura actuaba bajo el nombre “La Compañía”, con conexiones con el proyecto “Lahkta”, vinculado al oligarca ruso Yevgeniy Prigozhin, fallecido en 2023. Según Adorni, Lev Konstantinovich Andriashvili, residente legal en Argentina, dirigía las operaciones junto a su esposa, Irina Iakovenko.
Ambos coordinaban campañas de desinformación, obtenían datos sensibles y articulaban redes de contacto local a través de ONGs, fundaciones y focus groups. El plan incluía crear una base de apoyo social afín a los intereses rusos. La SIDE logró rastrear el financiamiento y los canales de comunicación con el exterior.
Frente a este escenario, el Gobierno creó el Departamento Federal de Investigaciones (DFI) dentro de la Policía Federal. El nuevo organismo investigará delitos complejos como narcotráfico, terrorismo y crimen organizado. Adorni aseguró que la Argentina defenderá su soberanía y destacó que los agentes del DFI serán capacitados con estándares similares a los del FBI.
