LIBRE
Charló, pagó y se fue sonriente: ocurrió durante este sábado a la mañana ante la vista de todos y fue identificado por la hija de una de las víctimas. FOTOS
Charló con un amigo, pagó el café y se fue sonriente ante la mirada atónita de Josefina Molina, hija de una de sus víctimas: “Un genocida condenado a perpetua anda suelto tomando café en los bares de Tucumán. Este sábado 4, durante la mañana, fue sorprendido Fernando Torres en uno de los bares que se encuentran en el Parque 9 de Julio”.
El periodista David Correa reveló lo que pasó: “Se lo encontró Josefina Molina, hija del ex senador provincial Dardo Francisco Molina, vicegobernador de Tucumán, cuyos restos fueron identificados en el Pozo de Vargas en 2014. Torres fue condenado por esta causa en octubre de 2020 a perpetua, con prisión domiciliaria”
“En el marco de la denominada “Megacausa 14”, en la que fueron juzgados exmilitares, gendarmes y policías por violaciones masivas y sistemáticas a los derechos humanos desde el comienzo del Operativo Independencia, en febrero de 1975, hasta mediados de 1977”, agregó Correa.
“Un abogado al que consulté me dijo que a la defensa de Torres le queda Casación como instancia hasta que quede firme la sentencia. Sí o sí debe cumplir con la domiciliaria, a menos que haya sido autorizado por cuestiones de salud a este tipo de salidas, situación que descarta. Me indicó el abogado que por situaciones como estas han solicitado que se pongan pulseras electrónicas a quienes se condene con domiciliaria, ya que ser adulto mayor no los convierte en inválidos o enfermos. Hasta el momento no lograron respuestas afirmativas”, remarcó.
“En diciembre de 2013 el TOF de Tucumán condenó a 37 represores por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura, en el juicio conocido como la megacausa “Jefatura II – Arsenales II”. Entre ellos estaba Fernando Torres para quien la condena fue de 16 años de prisión. Se espera aún la decisión final de Casación. Mientras tanto, toma café en los bares y los familiares de víctimas se lo cruzan en los bares. Horrible”, indicó en referencia a la segunda condena que recibió el represor.
¿Quién era Torres? “Era militar y algunos testimonios señalan que también estuvo en el centro clandestino de detención conocido como La Escuelita de Famaillá. ‘Impotencia’ es la palabra con la que sintetizó Josefina Molina sus sentimientos al tener a metros a uno de los condenados por la desaparición y asesinato de su padre Dardo Francisco Molina, vicegobernador de Fernando Juri (padre)”.
Fuente: El tucumano
